martes, 8 de diciembre de 2009

Dos poemas, reunión de diciembre "El umbral"


CONVERGENCIA


Convergen los ríos hacia el escenario sin fin
detrás de tus ojos,
memoria de brisas y aromas
espirales de color emergiendo de un movimiento
de tu mano,
sutil la voz de amanecer, aún canta
al resguardo de mi corazón
que no declina en recordarte.
Imperceptibles portales de luz
habitan mis poros hambrientos,
el universo avanza sobre mi
me abraza su caos luminoso,
vibran los contrastes
sin palabra final
sin recta definitoria
sin sustancia quieta,
me susurra:
no hay adentro
no hay afuera
todo es uno
viajemos,
el umbral somos vos y yo
nuestro amor.




Aril

CAMINOS Y UMBRALES


Metas cortas Aril,
con metas largas los caminos se extienden,
Ema se complica y se enreda en los tiempos,
el Chamán pierde su rumbo y se carga de memorias,
Yo me contraigo en la pereza...

Metas cortas Aril...
Serán caminos prontos,
espacios visibles,
siempre metas alcanzables,
umbrales definidos y accesibles.

Que caminar sea nuestra mas ambiciosa meta,
para no detener la búsqueda y el encuentro.
No hace falta soñar cuando se viven sueños...
pero al ser vivídos, uno olvida que fueron sueños.

Metas cortas Aril,
un solo sueño por ves,
un sólo umbral por día,
una sola aurora, un sólo ocaso...

Metas cortas Aril
y estaremos los cuatro,
embarcados en la nave,
con el sueño de nuestro destino.

Driante

Diciembre 2009

Reunión de Argonautas, diciembre 2009, "El Umbral"




















Mas imágenes de la reunión de Argonautas: El Umbral











Esto es lo que vi detrás del umbral... un atardecer prometedor, diría yo...

Preguntas del Chamán, ante el umbral


Pregúntame

¿Cómo desnudar el alma, el cuerpo?

Si en aquel rincón sólo baila el viento.
Dime
¿Cómo decir adios?
Si al principio el aire era
arena en sus zapatos, una luna roja, un sol anaranjado
Y pensar...
¿Cómo decir amor?
Si en el silencio sólo encuentro llanto.
¿Cómo hallar la luz?
si todo es fuego, una inmensa luz violeta, un umbral...

Mas sobre la reunión de Argonautas, del 6 de diciembre


Subir escaleras, y arrojar desde arriba,
avioncitos de papel.
Llegar hasta vos, hasta el fondo del calidoscopio.
Memoria de mariposas,
tan frágil llego hasta el límite,
no me atrevo a cruzar.
Viajero del tiempo, de mi cuerpo, de la noche.
En la oscuridad, busco tu voz de serpentina.
Giro y giro siempre en el mismo lugar.
La nave se me antoja inmensa si no estás.
El paisaje se torna desértico,
y a veces, una flor roja
se distingue a lo lejos.
Saldré a la noche, cruzaré el umbral de la memoria,
cientos de bicicletas transitan el aire,
y las veo pasar.
Te busco
en aviones invisibles busco tu regreso.
Las estrellas hablan de puertas que hay que abrir.
Te extraño
y me pregunto cuál es el instante de la explosión,
dónde se encuentra la magia.


Ema



lunes, 7 de diciembre de 2009

Reunión del 6 de diciembre- "Atravesando el umbral"

Lobo busca inspiración y la encuentra en su mágico mundo interior
Pluma sabia de Driante, aconseja

Todos... abrazo y ronda de luz
Aril, la tinta, el papel... un umbral que se abre
Ema cruza y vuelve con una sonrisa...

El umbral resvistido de estímulos en busca de la convergencia




viernes, 4 de diciembre de 2009

El umbral

"Cantidad mínima de señal que ha de estar presente para ser registrada por un sistema
la mínima cantidad
base de la exploración psicofísica de las sensibilidades
punto en que un estímulo ocasiona una transmisión de un impulso nervioso
que tiene probabilidades de ser detectado
El estímulo debe alcanzar cierta velocidad para ocasionar el umbral o en otras palabras,
una mínima reacción,
si la velocidad no es alcanzada, no se efectúa el impulso nervioso.
Esta última explicación se conoce como la ley del todo o nada."

¿Qué cosas se tienen que dar en el momento exacto para que algo suceda?-
Es la pregunta lanzada por Ema, -¿Es el umbral un punto de fusión donde se producen los encuentros al azar, las decisiones más profundas? Es culminación o principio, lo mínimo o lo más inmenso inimaginable...

jueves, 19 de noviembre de 2009

La estación de los jacarandaes

Sabe Aril que la estación de los jacarandaes vestidos de cielo
es el tiempo para esclarecer los vestigios de luna,
los que han quedado atrapados en el polvo que cubre las huellas
abandonadas al desparrame del viento y los caminos,
que se mueven como locos,
huyéndole a los carteles y los cordones de las veredas.
Intuye, tal como le enseñaron los duendes de los cuencos,
que nuevos designios pasarán taimadamente por la noche,
tratando de evadirse de las hadas y otros magos como ella
colgados de la cola de algún cometa.
Otras veces escuchó su risa socarrona desde su ventana
cuando ya era demasiado tarde.
Esta vez se propuso estar más atenta.
Apenas se hizo perceptible el estallido verde de los brotes,
se descubrió de la sombra de su roble amado
y bajo el mandala de la noche celeste, alzó su cabeza y comenzó a mirar.

No demoró mucho en hallar una respuesta.
Los brotes suelen susurrar secretos cuando estallan en primavera,
necesitan ponerlos en el oído de alguien
para desandarse de los sueños del invierno
y cubrir de colores el equinoccio.
Así fue que una vocecita ondulante le golpeó el hombro
y ella se dio vuelta justo cuando una estrella con destellos naranjas
le guiñó el ojo.
Risitas pequeñas como alitas de abeja
se escurrían entre las hebras de la crines del cometa,
lejos estaban ya, antes que pudiera escuchar más.
Permaneció mirando la estrella por un rato.
La vio descender hacia el sur,
coqueta miraba su reflejo frutado en los pétalos del malvón blanco,
el que bullía aromas en el alféizar de la ventana de Ema.
Sin titubeos, Aril montó una de sus nubes de plata,
veloz sobrevoló el bosque y la calle de los paraísos.
Ema, en la terraza sentada,
una pierna hamacándose y esporas deslizándose por sus pestañas,
acariciando sus pupilas violetas.
-Es hora de sacar los cuadernos, Ema- instó el hada
Y así lo hizo…

Mientras tomaban los primeros (o los últimos) matecitos nocturnos,
el cometa las envolvió de luces anilladas.
Le pareció distinguir entre las risitas algo familiares ya,
el aleteo de la mariposa reina y una voz de gorrión
despidiéndose de la terraza y los trazos amarillentos
de los cuadernos dormidos de Ema.



Aril

martes, 21 de julio de 2009

Los mares y las nubes




La amistad tiene sus ritos, el tiempo la arbitrariedad para depositar mojones que señalen los momentos justos donde habrán de emerger los recuerdos y aunarse las manos en ronda. Todas las auras resplandecen para conformar un arco iris, se complementan, danzando, recorren curvas y surcan playas y mesetas, se deslizan suavemente como dirigidas por el sonido del viento y la caricia del mar. Todos los ojos beben del mismo cáliz, copulan bajo la luz del poniente las miradas y las risas ejecutan una música que el mundo reconoce, que late en sus entrañas, en el núcleo antiguo de los tiempos.
Respira Aril, respira… el Este le trae agujetas de sol para enlazar destinos.
Respira y llena su pecho de aire de jardines y verde de eucaliptos.
Ávida inhala el suelo, el agua y el fuego y cierra los ojos para retener cerca de su corazón la palabra que le envían los designios, el susurro de seres celestes que vibran lejanos. Expande su cuerpo de luz convidado de sombras, lo expande como un mar. Quiere ser grano de sal en la matriz de un mundo sin distingos, quiere ser un manto que albergue a todos los perdidos.
Desconocen sus amigos que cuando viene a su encuentro ella es barco de papel a la espera de una ola que comande su destino, que la empuje lejos, hacia donde el amor sea más profundo y los peces la cortejen. Desconocen que su cuerpo vibra como barrilete que quiere ser remontado, bien alto, hasta donde la atmósfera se enfríe, pero sostenido firme al final del cordel por una mano gentil que sepa contenerla cuando lleguen las noches y bramen las tormentas.
Es por eso que ha respondido el llamado de los Argonautas. Para surcar mares de palabras y dejarse salpicar por los sueños.
Si ellos se lo permiten, viajará siempre cerca. A veces sentada a babor, tiñendo los dedos de sus pies en el color de las aguas. Otras, montada en una de sus nubes mágicas, la de color índigo y luz plateada, siempre unida a la proa del Lucero con la fuerza de su alma.




Aril

domingo, 7 de junio de 2009

Ema y la oscuridad


El Lucero navega por territorios desconocidos, y sus tripulantes, parece que tuvieran los ojos vendados, porque nadie atisba a deducir la posición de la nave, exactamente. Sólo tienen una vaga idea de que están sobre un desierto, y la sed acucia, sin remedio.

Ema sabe que ha de brillar, tanto como la noche, como la luna que presiente posada sobre los cerezos, pero ahora, la soledad tiene ojos profundos, porque un hombre de tierra, pura candela y tierra en sus caricias, le dejó una tristeza de lluvia sobre sus hombros, y se fue a buscar la fantasía que todos los hombres buscan, la del corazón hambriento, la del cuerpo muerto de sed, saciado en un lecho de agua, una mujer de agua, para un hombre de tierra. Ema observa la noche desde su bitácora, cuenta estrellas, y de sus senos, se desprenden mariposas.

Volverá a brillar, porque la oscuridad es un reto, una esperanza, y está a punto de explotar en mil partículas, para acabar con la pena.

lunes, 6 de abril de 2009

El sendero


Todo mi camino hacia remolinos violetas,
el sendero va hacia allí, contra todo pronóstico,
al lugar donde debimos encontrarnos,
yo, con mi mochila de siete cuadernos
escritos por tu ausencia.
Vos, con tu sonrisa antigua de hombre sinedad,
tu aroma de árbol de tilo en la lluvia.
Ojitos de luna y mar.
La ruta teje noches de puertas cerradas y
teléfonos que no han podido ser.
Cruces de caminos donde los pájaros anidan
en los cables eléctricos.
El sol se pone y yo vuelvo a creer
que nos sucede unmilagro.
Plantaría madreselvas
en la tierra donde te llevaron,
para que te lleves mi olor, a donde vayas,
porque en definitiva, la niña del pasillo,
la hija de Nora y Juan,
la morochita del pelo largo y lunar en el mentón,
y esta mujer que arrastra la soledad
como un velo prusia enla noche,
esta mujer que guarda enla cocina
tu plato, tu tenedor,
tus pecas en la mesita de luz,
te pertenece,
como te pertenece el sol de abril,
la luz de las ocho de la mañana,
la música, la torta de chocolate,
la luna, las estrellas.
Este viaje es sin señales, a campo abierto,
a pie, sin estridencias.

sábado, 4 de abril de 2009

El camino elegido



Muchas veces en mi vida tuve que elegir un camino y me costó poder tomar esa decisión.
Pero nunca me arrepentí de lo hecho lo que con el tiempo me dio la felicidad. Mis ojos vieron mas allá de lo que se percibía del otro lado del puente y sabía que el camino elegido era el correcto. En la travesía tuve muchas dificultades, pero no volví atrás, seguí adelante!!
Hoy pienso como pude tomar esa decisión sin saber como me iba a ir…
Cuando decidí vender mi casa porque tenia que evitar algo peor y tuve que ir a vivir a casa de mi madre, con quien nunca me había llevado bien y sufrí… pero lo hice, era lo mejor en ese momento. Cuando le dije a mi hijo que nosotros nos hundíamos y el tenia que abandonar el barco, por su familia y por sus hijos, tenía que pensar en ellos, pues lo nuestro ya no tenia remedio…

Nunca me arrepentí de las decisiones que tomé. Mi hijo progresó y hoy dia esta muy bien con su trabajo y con sus hijos. Siempre creo que decidí lo mejor sobre todo… para el bien de mi familia!!
Y no me arrepiento de ello, lo volvería a hacer sin cambiar NADA!! Elegí el mejor camino para ser feliz
Prístina

Todos los caminos me llevan a vos, Caballero Celeste


Quiero caminar de tu mano
que volemos
que lloremos
y soñar
que despierto deslizándonos
por el horizonte más lejano
quiero tu mar
tu luz
tus cielos
los ángeles que cargan tus infiernos
tu tempestad dormida
tu querella
tu rima incongruente
de niño de ojos húmedos
tu garganta de agua quieta
pronunciando mi cuerpo de colmena
tu boca bebiéndose el elixir de mis labios
tu luz atravesándome

Quiero migrar todos los espacios
donde existas
mientras dure lo que dure
y lleguen donde lleguen
las huellas que nos unen
quiero forjarme en tus pasos
y que me amasen las sustancias
del destino
para ser siempre tu mujer y tu amiga
Aril

Driante y la espada protectora para todos los viajes


Llevamos varias etapas pasadas y quedan tantas por recorrer…
No pierdan grano de arena sin mirar, ni reverso de roca sin palpar o fruto sin saborear.
Es la alegría de la andanza un eterno “-mientras tanto…-“
Cada vivencia eterna, cada paso recorrido, efímero…, mortal del camino hecho, camino por el cual nunca volveremos jamás…., nunca jamás.

Hoy vamos a …-por la nave-, pero ya dentro de ella seguiremos recorriendo senderos y rutas inéditas y seguiremos expresando el camino.
Y no olviden queridos argonautas que nuestros caminos son nuestros sueños, vuestros sueños, que no tienen meta, porque jamás terminarán; nunca jamás…

Un rayo de energía marca sólo la dirección, pero no el camino ni la meta…

En este viaje no soy un guía, pero soy el dueño de la espada protectora, a lo que puedo decir confiado:

¡¡¡¡ Avancemos sin miedo !!!!
Driante

viernes, 3 de abril de 2009

Caminos, pasos y puentes


En el jardín flotante bajo la cúpula de uvas, los caminos se abren como rosas bajo la lluvia.
Los Argonautas habrán de andarlos y desandarlos, repasando sus rastros renovando sus huellas.

Llamado a una próxima misión

Llevaron los argonautas la lluvia en sus cascos. Ema, siempre prendada de nubarrones, removió los fondos de sus sombreros mágicos para verter sus versos. El Chamán prestó sus lágrimas de niño para fertilizar la ronda. Mientras que, Aril bailaba en círculos agitando los vientos, Driante y Prístina, declamaban la serenidad de sus almas nutridas de experiencia para dar las nuevas coordenadas a los navegantes.

Y dijo la Sacerdotiza: Antes de partir debemos reconocer los pasos sobre nuestras sendas y así poder trazar nuevos caminos...

Y dijo Ema: Deberemos escuchar a nuestro corazón para saber hacia dónde queremos ir. Nosotros hacemos el camino, y cada uno sabe por dónde quiere tomar, o al menos intentarlo. Habrá quienes hagan diez pasos y deshagan cinco, como si fuera un juego infantil, como si no quisiéramos llegar.
Habrá quien tome un camino que sólo vaya por tierra, que no cruce ningún río, sin que haya puentes ni fronteras para vencer. Otros sí necesitarán cruzar y volver a sus orígenes, removiendo los obstáculos.

Y siguió pensando: ¿Qué dejamos detrás, en el camino?
Nombres, ojos, libros, música, vicios, terquedades y caprichos, que no nos llevan a ninguna parte. ¿Cómo serán nuestros pasos? ¿Sobre qué caminaremos, descalzos, sobre las hojas, a la orilla el río, a la orilla del mar?

"Repasemos nuestro camino de individuos para luego pensar como Argonautas donde queremos ir"
Este fue el mensaje final...

Bajo la cúpula de uvas en el jardín flotante, cuando la tarde dormía con la promesa de la lluvia en su regazo, los Argonautas acordaron su próxima misión.

miércoles, 4 de marzo de 2009

Reunión del 31 de Enero de 2009, Los Argonautas, Ritual para convocar a la lluvia

















Los Argonautas, Driante, El Chamán, Aril, Ema, todos en plena producción literaria, convocadora de la lluvia... en fin.. estas cosas de Argonautas, en los patios mágicos de La Sacerdotiza Prístina.

Cuentan que en este lugar, al atardecer, suele verse a la Maga de las Estrellas...



parte de Los Argonautas, de izquierda a derecha: Eloy, Miguel Angel, Carina y Daniela. Faltan paula y Caty

lunes, 2 de marzo de 2009

El mandala


Los Argonautas


Prístina, con las manos rebozantes de dulzuras
Driante, ofreciendo el cuenco mágico
Ema y el Chamán,
todos en los jardines bajo la cúpula de uvas frescas,
respirando el frescor del verano y el aleteo de la mariposa dorada.

domingo, 1 de marzo de 2009

Fantasmas


Acorralan el perímetro en el desierto, sólo sombras, escorpiones varados en la carretera del oeste.
La puesta del sol devoró la luna, de un bocado, sin martirio alguno la embarazo de estrellas y le robo una gema que colgaba en sus ojos, como jade, verde de sabiduría, se partió como cristal de lluvia sobre nuestra naturaleza... los indios lloraron hasta bañarse en tristeza, ¿Quién nos robo nuestra estrella? Los escorpiones sin veneno divagaron como constelación de los cielos, sin estrellas correspondientes, con la ausencia de una, la mas importante, la que ilumina el alba cuando los sueños rompen al amanecer.
Navajos en la montaña, sólo cenizas danzando como remolino de fantasmas, luchando por el retorno del alba.
El clan de los chamanes marchó hacia el oeste, montaron a la serpiente de los lagos del sur, para cruzar los pantanos del oeste, los claustros del encierro, el exilio hacia la estrella desvanecida.
Lobo gris ahí marchaba, lleno de tormentos, una vez al año los fantasmas de su infancia despertaban y atemorizaban su sueño, él debía caminar semanas enteras hasta encontrar lluvia bendecida por navajos, sus ancestros entregados en muerte alguna en cubículos de montañas, en eternidad, para ser lluvia bajo el desierto, para dar agua a la naturaleza de los árboles, para vibrar con el universo. Él debía caminar bajo esa lluvia para que pudiese devolver el brillo de la estrella de jade, que algunos pensaron que había desaparecido para siempre.
Hasta que Lobo gris no logre borrar los fantasmas no ha de amanecer, esperemos que encuentre los cubículos de agua en las montañas y entregue los fantasmas que atormentan la mente de nuestro chamán.
Su exilio será permanente, volverá con la mente fértil, libre de fantasmas, con cenizas en los pies, por haber quemado hasta la ultima sombra de la noche, vendrá con el alba antes del amanecer... Sólo hay que esperar.
Lobo gris.

sábado, 28 de febrero de 2009


Sintió el llamado...aún no estaba lista para hablar.
Sentada en la mecedora, cerró los ojos. Volvió a abrirlos...miraba la luna.
Los pequeños molinos de viento chirriaban fuera de su ventana.
Se levantó y salió al jardín, caminó cerca de los frutos de su huerta,
hojas verdestiernasnaciendo.
Sintió el llamado...
Su gata blanca ronroneaba perfume a sal, a espuma, a viento.
Miraba la luna...
La noche estaba fresca, cobijando las señales que venían de los Confines.
Cerró los ojos, la gata blanca maulló.
Colocó sus manos en el centro de su pecho, haciendo un mudra.
Respiró suave...
Uno a uno emergieron los soles, tibios, resplandecientes....
Su cuerpo se dividió...
Dos, tres niñas. Cuatro, cinco, seis...multiplicadas. Quería estrecharlos en sus brazos a todos al mismo tiempo.
Abrió los ojos...preparó sus valijas.
Los Argonautas la esperaban...había sentido el llamado.

Derramasoles

viernes, 20 de febrero de 2009

La lluvia derramada (reunión del 31 de enero de 2009)


HOLA SUSURRO


Como siembra nocturna
de semillas mezcladas.
Amor y palabras,
caminos y canciones.


Los sueños se agolpan en la siesta,
ninguna gana.
Un susurro se anima caminando,
nos avisa que vino a espiarnos.


El barco ya surca los mares
toda el agua no es mucha ni tan poca.
Amar es amarte como siempre,
quererte sin olvido...
casi resignarse.


Hola susurro mariposa,
aqui estamos navegando en tu barca.
No nos falta nada
estamos seguros de nuestra senda...


Hola susurro...


Driante

LA ENTREGA


Me entrego a la lluvia
como la lluvia se entrega a los hombres,
desde el pecho donde late el corazón de los misterios,
desde los ojos de Dios
que abre su cuerpo y se derrama,
que se vale de nosotros para que lo miremos,
para tender la mano y sonreir.
Vivo siendo una en el núcleo de un todo,
en la cimiente de una semilla que extiende
la infinitud de su verdad
para verter sobre nosotros amor y vida.


Aril.

INVOCANDO LA LLUVIA
QUE PEDIMOS,
LLUVIA
QUE NOS REFRESQUE Y
NOS LAVE LAS PENAS,
NOS SAQUE TODO LO MALO QUE LLEVAMOS DENTRO,
QUE NOS AYUDE A SOÑAR
QUE ESTAMOS EN UN MUNDO MEJOR CON SERES MAS BUENOS Y MAS HONRADOS,
QUE LA MALDAD SE LA LLEVE LA LLUVIA A LOS ACANTILADOS,
QUE LOS ARROJE MUY PROFUNDO
DONDE NO PUEDA SALIR Y TODOS NOSOTROS TENGAMOS PAZ Y BONANZA.

HICIMOS EL RITO DE LA LLUVIA Y VA A LLOVER...LO SE ...
MUCHAS ALMAS QUE SUFREN
ALIVIARAN SUS PENAS, LOS CORAZONES SENTIRAN UN NUEVO LATIDO
Y LA MARIPOSA SE POSARÀ EN NUESTRO ÀRBOL PARA CUIDARNOS
Y QUE NADA NOS PASE PORQUE NOS QUIERE SIEMPRE UNIDOS
Y FORMANDO UN LAZO DE AMOR.
PRÍSTINA

jueves, 12 de febrero de 2009


Lluvia, resignación, lluvia y agonía, deseo de alumbrar, de escribir en oraciones el milagro.

Los muertos transmutan en mariposas y se acercan a la poesía, porque en ella vivieron y amaron la lluvia.

Mis pies descalzos no saben bien dónde pisan aún. Pretendo el abrazo de tu piel de indio, de chamán del bosque y un relámpago parte en dos mis sueños de bruja.

LLuvia intermitente, lluvia verde, amarilla, cayendo sobre mis hombros, dame el descanso, el olvido. Llevate sus ojos hasta el otro hemisferio y dame un arcoiris, sólo para empezar.